El que quiere ser opositor y el que dice ser un revolucionario, todos entran y salen de esta ciudad Valiente, que en definitiva es Bendita, por su gente. Ciudad Bendita.
Cuando un hombre dice: yo soy apolítico, es como si dijera: yo soy un cretino. No digo lo mismo de un opositor que no comparte mis ideas. Pienso que es un equivocado, pero nunca pienso que es un cretino.
Preguntarnos porque vamos de mal en peor Es ignorar aquello de dónde venimos Veras, no preguntarías por que la rosa que creció en el asfalto tenia pétalos marchitos Al contrario Celebraríamos su tenacidad Amaríamos su voluntad de alcanzar el sol Bueno Somos rosas Esto es concreto Y estos son mis pétalos marchitos No me preguntes porque Pregúntame como.
Aborrezco mortalmente el mando porque mis servicios no han sido felices porque mi natural es contrario a la vida sedentaria porque carezco de conocimientos porque estoy cansado y enfermo
El que quiere ser opositor y el que dice ser un revolucionario, todos entran y salen de esta ciudad Valiente, que en definitiva es Bendita, por su gente. Ciudad Bendita.
Hay que comparar cuidadosamente el ejército opositor con el propio para saber dónde la fuerza es superabundante y dónde deficiente.