La política, bien entendida, se parece más al comercio que a la guerra. Tiene más de competencia que de confrontación. Necesita la concertación de voluntades. A mediano plazo, el juego limpio resulta más redituable que el golpeteo. La solidaridad vale más que la competitividad
Era una mujer de mediano entendimiento, información escasa y temperamento caprichoso.
La ocultación de ideas molestas puede que sea corriente en la religión o en la política, pero no es el camino a la sabiduría y no tiene sentido dentro de la tarea científica
Hay que tener mucha personalidad y un entorno en donde uno se pueda sentir arropado para no dejarse llevar por la corriente de la moda.
Si las páginas de este libro consienten algún verso feliz, perdóneme el lector la descortesía de haberlo usurpado yo, previamente. Nuestras nadas poco difieren; es trivial y fortuita la circunstancia de que tú seas el lector de estos ejercicios, y yo su redactor.
El dolor es una cosa bestial y feroz, trivial y gratuita, natural como el aire
Si uno se mantiene fiel amante de lo que realmente vale la pena amar, y no un residuo insignificante del amor y las cosas indignas y sin sentido, obtendrá más felicidad y crecerá más fuerte.
Si sólo una cosa, si algo insignificante te ocurriera, y despertaras de tu sueño de bella durmiente. Si tuvieras un hijo, y este muriera. Déjate envejecer, permite que las arrugas hindús emerjan de tu rostro de caucho aparente. Pero por favor, si tan sólo pudiera verte enfrentarte a eso. Me pregunto si podrías siquiera convertirte tú misma en un ser reconocible. Esa es mi duda.
Me apasiona la música. Y porque me apasiona, trato de liberarla de las tradiciones estériles que la sofocan. El color de mi alma es la rueda de murciélagos de hierro gris y triste sobre la aguja de mis sueños.
¡Qué delicioso alborozo sentía correr por mis venas, cuan agradablemente todo mi ser respondía a las vibraciones y efluvios de aquel día gris saturado de una esencia primaveral, que en sí parecía lenta en percibirse!
La memoria es un espejo opaco y vuelto añicos, o, mejor dicho, está hecha de intemporales conchas de recuerdos desperdigadas sobre una playa de olvidos.
En la historia oficial de este tiempo aparecerán estadísticas, índices de producción macroeconómicos, muchas impunidades maquilladas y algunos próceres de baba incontinente. Sólo el teatro hablará del hombre opaco que sufrió la lejanía y la gangrena muda del destierra, lejos de un país hermoso y triste, que todavía no sé si de verdad existe.