Nunca se supo, a lo largo de toda su vida, que violara una sola regla de su orden; no es posible encontrar la menor mancha en su conducta, y se asegura que es un observador tan estricto de su castidad que no sabe en qué consiste la diferencia entre hombre y mujer. Por consiguiente, el vulgo lo considera un santo. ¿Eso lo hace santo a uno? inquirió Antonia. ¡Dios me ampare!
La inspiración es la hipótesis que reduce al autor a un papel de observador
Se me hace tan difícil comprender al científico que no reconoce la presencia de una racionalidad superior detrás de la existencia del universo, como comprender al teólogo que quisiera negar los adelantos de la ciencia.
Ha enriquecido el mundo en sentido científico y cultural, y también ha beneficiado económicamente a muchas personas.
El comportamiento en la actualidad está dominado por los buscadores. Usted va a su buscador favorito, escribe lo que quiere buscar y la da al botón de buscar. Luego toman los primeros resultados y siguen los enlaces.
Un cristiano nunca puede juzgar lo interno de nadie. Como cualquier ser humano, un cristiano es un buscador de la verdad.
¿Qué le hubiera gustado ser si no hubiera sido escritor? -Me hubiera gustado ser detective de homicidios, mucho más que ser escritor. De eso estoy absolutamente seguro. Un tira de homicidios, alguien que puede volver solo, de noche, a la escena del crimen, y no asustarse de los fantasmas.
La mejor receta para la novela policíaca: el detective no debe saber nunca más que el lector.
Raúl se ha inventado solo. Yo no soy su descubridor porque Raúl se descubre él solo. Él se inventó a sí mismo, es de otro planeta. Cuando Raúl toca la pelota el mundo se detiene. Su único rival es y será la historia
Y quiero callar porque no digan que miento pero el tiempo, descubridor de todas las cosas, lo dirá cuando menos lo pensemos.
La mejor receta para la novela policíaca: el detective no debe saber nunca más que el lector.
Lo que siguió entonces fue una exhaustiva comparación de detalles y un momento de pavoroso silencio cuando el detective y el científico llegaron a la conclusión de la práctica identidad de la frase común a aquellos dos rituales diabólicos pertenecientes a mundos tan diferentes y distantes entre sí.