Si mis escritos, en general, han sido útiles para mis contemporáneos, espero que estas memorias no caigan en saco rato para los que puedan venir detrás de mí, y especialmente en cuanto a la promoción de la virtud y la piedad, que, espero que yo pueda decirlo, he procurado practicar, y he tratado de inculcar a los demás
No debemos dejar pasar la probabilidad que al inculcar constantemente la creencia en dios en las mentes de los niños, ha producido, quizá, un efecto heredado sobre sus cerebros aún no desarrollados completamente, que será difícil para ellos deshacerse de esta creencia en dios, como si el mono tirara su miedo y odio instintivo hacia una culebra.
No nos dejemos inducir a error: los grandes espíritus son escépticos. Zaratustra es un escéptico. La fortaleza, la libertad nacida de la fuerza y del exceso de fuerza del espíritu se prueba mediante el escepticismo.
Poca observación y mucho razonamiento puede inducir a error; muchas observaciones y un poco de razonamiento a la verdad.
Un hombre escribe para expulsar el veneno que ha acumulado debido a su estilo de vida falso. Está intentando recapturar su inocencia, pero todo lo que logra hacer (escribiendo) es inocular el mundo con un virus de su desilusión. Ningún hombre pondría una sola palabra en un papel si tuviera el coraje de vivir aquello en lo que creía.