Un suspiro es un prisionero que escapa de la cárcel del alma. Un suspiro es el aire que roza las palabras. Es resumen, es posdata. Un suspiro es una poesía ahogada
El futuro se presentaba ante él como una sentencia, pero no de cárcel sino de palabras interminables, plagada de subordinadas innecesarias, como solía decir con ácida ironía en los bares y los pubs del campus que frecuentaba. No es que el futuro que le esperaba le entusiasmara precisamente.
No he matado a nadie sólo erré un penal
Aprende de mí que un hombre prudente, que ha escuchado una acusación penal relacionados con tantos pormenores absurdo deja de ser prudente cuando se hace a sí mismo el eco de lo que ha escuchado, ya que si la acusación debía ser un factor calumnia, el orador A sí mismo convertido en el cómplice de la slanderer.
El insulto, el presidio y la amenaza de muerte no pueden impedir que el utopista sueñe...