Quien se ha visto desde la cuna privado de lo humanamente más necesario es difícil exigirle la misma facilidad para comprender lo de la buena vida que a los que tuvieron mejor suerte. Si nadie te trata como humano, no es raro que vayas a lo bestia...
Sólo el médico y el dramaturgo gozan del raro privilegio de cobrar las desazones que nos dan.
Ladrón, trabajaba para otros: ladrones más adinerados, patrones que proveían el exótico software requerido para atravesar los muros brillantes de los sistemas empresariales, abriendo ventanas hacia los ricos campos de la información.
Frívola con arte y graciosa cual una muñeca, sin sensibilidad, su existencia entera la consagraba a mantener el prestigio de estar de moda, deslumbrando por el gusto artístico y exótico de sus vestidos.
Lo que más ávidamente amamos: lo pintoresco y lo imprevisto.
Es necesario que tu película despegue. La hinchazón y lo pintoresco le impiden levantar el vuelo.
Los economistas tienen un modo singular de proceder. Para ellos no hay más de dos clases de instituciones, las artificiales y las naturales
El ser amado es reconocido por el sujeto amoroso como átopos, es decir como inclasificable, de una originalidad imprevisible. Es átopos el otro que amo y que me fascina. No puedo clasificarlo puesto que es precisamente el único, la imagen singular que ha venido milagrosamente a responder a la especificidad de mi deseo. Es la figura de mi verdad.
Regreso a la filosofía no en el sentido absurdo de que ahora nos vamos a convertir todos en filósofos, pero apuntar la idea de que si el hombre es un ser pensante, pues entonces que piense.
El amor es un misterio. Todo en él son fenómenos a cual más inexplicable; todo en él es ilógico, todo en él es vaguedad y absurdo
Es un chocante liberalismo el que quiere todo para sí y nada para los otros. Tal sucede con los testamentos civilizados: dan todo a la familia como si no hubiera otras clases dignas de liberalismo.
El peregrino que ansía refrescar sus secos labios en las aguas vivas, y sin embargo no se atreve a lanzarse en ellas por temor a la corriente, se expone a sucumbir de calor. La inacción originada del miedo egoísta, no puede producir sino malos frutos.
Cada trecho recorrido enriquece al peregrino y lo acerca un poco más a hacer realidad sus sueños
..., creían los judíos que aquella región, que Dios les había elegido, exegía un culto especial a Dios, totalmente distinto del de las otras regiones, y que incluso no podía tolerar el culto de los otos dioses y propio de otras regiones.
La teoría del dinero necesariamente presupone la existencia de una teoría de liquidez de los bienes. Si logramos aprehender esto podremos entender cómo la suprema liquidez del dinero es sólo un caso especial -que únicamente presenta una diferencia de matiz- de un fenómeno genérico de la vida económica, es decir, la diferencia en la liquidez de las mercancías en general.
Ser psicoanalista es, sencillamente, abrir los ojos ante la evidencia de que nada es más disparatado que la realidad humana.
Todo lo que ella hizo o deshizo, por disparatado que pareciese a un observador con prejuicios, fue hecho con lo que se deben hacer las cosas, es decir, con valor y sin temor a las consecuencias. Es esta forma, cada quien tiene el derecho de obrar cono le parezca. Pero echarse al agua a nadar y no querer al mismo tiempo mojarse la ropa, esto, Gerardo, es imposible.
Quiero que la vida de Lila sea diferente a la mia. El español es un idioma muy importante, y si comienza a estudiarlo desde ahora, lo hablara con fluidez en su adolescencia.
El hecho de que la sociedad, y el gobierno, y todo lo demás era diferente hace 100 años, no quiere decir que la gente no tenga relaciones sexuales, no pueda hurgarse uno su nariz, o que se maldiga
Siempre fui un rebelde... Pero por otro lado, quería ser amado y aceptado, y no sólo un músico, poeta, lunático y bocazas. Pero no puedo ser lo que no soy
Siempre fui un rebelde... Pero por otra parte quería ser amado y aceptado, y no sólo un músico, poeta, lunático y bocazas. Pero no puedo ser lo que no soy.
El dolor es más llamativo que la felicidad