Actualmente oigo clamar por doquier: ¡No razones! El oficial ordena: ¡No razones, adiéstrate! El asesor fiscal: ¡No razones y limítate a pagar tus impuestos! El consejero espiritual: ¡No razones, ten fe!
Así como los brahmanes están gritando Hinduise India, deberíamos gritar Dalitise India. Grita que odiamos el hinduismo, odiamos brahmanismo. La captura de los templos hindúes expulsando a los brahmanes de ellos.... El odiado debe odiar. Deben ser poderoso y organizado. Quiero crear ira.
No me sorprende que la figura del anciano caballero resulte imponente, Goethe no es mucho más alto que papá, pero su aspecto, su lenguaje y su nombre son imponentes. Su pelo no es del todo blanco, su paso es firme y sus maneras suaves, pero la fuerza de su voz es maravillosa y puede gritar como diez mil guerreros.
Dejemos a los envidiosos la tarea de proferir injurias y a los necios la de contestarlas.
Por acaso se oye proferir a algunos como un oráculo misterioso la siguiente proposición: El bien común prefiere al particular. Pero en la práctica nada se ve tan comúnmente sino6 que el interés del público es sacrificado al interés del individuo.