El teatro será desteatro; será psíquico, material, irreverente, sucio. Se impondrá el desnudo, la aberración sexual, homosexo, lesbianismo y drogados en crímenes. La masa aplaudirá, corrompida sin saberlo
El tedio puede escuchar todas las voces tentadoras, tiene camino para todos los extravíos, y no hay aberración que un momento dado no pueda servirle de espectáculo
Ya fuera de trabajo, del matrimonio o de la familia, siempre he sido una pifia avanzada.
De una confidencia a una indiscreción no hay más distancia que la del odio a la boca.
Fe, alegría, optimismo. -Pero no la sandez de cerrar los ojos a la realidad.
He conocido prisioneros en la Bastilla que las alimentaban y las tenían por compañeras... ¿Por qué no empiezas tú también? Sé de una araña que descendía a un golpecito con el dedo, y de una rata se acercaba cuando traían la comida diaria para compartirla con su comparo de cárcel. ¡Qué encantador, tener sabandijas por invitados! Sí, y cuando les falla el festín, ¡Se comen al anfitrión!
Si fuera futbolista, jugaría para Huracán y de ́fulbá centro ́, bien en el medio del área, aunque sea zurdo. Sería una especie de líbero. Me gustaría enfrentarme contra tipos grandotes. Primero, evitar el caño, después el amague, después que me pase, y si me falla todo eso, lo corro y le doy una piña. De esa manera, los delanteros no harían goles
No existe la guerra inevitable. Si llega, es por fallo del hombre.
¡En qué patéticos esclavos nos convertimos por el poder dominante de la gravedad sobre todas las cosas de la tierra! (...) Nuestro único consuelo es que no podemos solucionarlo. No es fallo nuestro: nos guste o no, tenemos que obedecer a la gravedad, nuestra tirana.
Los recuerdos son un traspié en el sendero de la esperanza.
La verdadera revolución, tarde o temprano, debe instaurar el diálogo valeroso con las masas. Su legitimidad radica en el diálogo con ellas, y no en el engaño ni en la mentira.
Sueña el rey que es rey, y vive con este engaño mandando, disponiendo y gobernando; y este aplauso, que recibe prestado, en el viento escribe, y en cenizas le convierte la muerte, ¡desdicha fuerte!
El misterio del contrasentido de la conducta de nuestro pueblo, aún de los gobernantes, reside en la ignorancia de las masas que las hace indiferentes a cuestiones vitales.
Nadie es como otro. Ni mejor ni peor. Es otro. Y si dos están de acuerdo, es por un malentendido
Ningún hombre es igual a otro. Ni mejor ni peor, es otro. Y si dos están de acuerdo alguna vez, es por un malentendido