Gracias, compañero y amigo, comandante de la esperanza latinoamericana, Fidel Castro
Jugó al béisbol con gran pasión. Esa pasión solo podía ser igualada con su compromiso de hacer una diferencia en los menos afortunados. La gente consideró a Roberto como un gran pelotero y por ser muy compasivo. Era también un gran padre, esposo, compañero y amigo
Te he dado relaciones, buenos amigos y un compadre como hay pocos. Has viajado por el mundo, te he conseguido buenos puestos, te he dado importancia a través de tus chistes y aventuras. Tienes el cariño de grandes y chicos. En fin, eres todo un personaje.