Hesíodo, cuyos escritos juntamente con los de Homero contenían el sistema canónico de los cielos, supone que dioses y hombres han surgido por igual de fuerzas desconocidas de la naturaleza.
Yo diría aquí algo que escuché de un eclesiástico del grado más eminente, : La intención del Espíritu Santo es enseñarnos cómo se va al cielo, no cómo funcionan los cielos