Cuán triste, largo y cansado, cuán angustioso camino, señala el Ente divino al infeliz desterrado.
Para quien se siente solidario con el destino de este mundo, el choque de las civilizaciones le resulta angustioso
Había nacido para ser feliz. Durante mi juventud nunca me había afligido la tristeza, y si en algún momento me sentía abatido, contemplar las maravillas de la naturaleza o estudiar lo que de sublime y excelente ha hecho el hombre siempre conseguía interesarme y animarme.
Cruel es quien al afligido reprende.
Y para los amantes su amor desesperado podrá ser un delito... pero nunca un pecado.
Personalmente entiendo el amor como el deseo casi desesperado de que alguien perdure, a pesar de sus deficiencias y de su vulnerabilidad