El aseo del vizcaíno es proverbial ; el español apenas se lava una vez en su vida y se muda una vez al año. Oíd hablar a un vizcaíno, y escucharéis la más eufórica, moral y culta de las lenguas; oídle a un español, y si sólo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes ni blasfemias.
Voy a tomar un baño antes de salir y me perfumaré con un perfume que es un secreto mío. Sólo digo una cosa de él: es agreste y un poco áspero, con una dulzura escondida. Él es.
Cuando estaba en un avión a Japón, como hace dos años... y no tenía maquillaje conmigo, me fui al baño y se utiliza un rotulador(sharpie)! No recomiendo perfilarse los ojos con un rotulador(Sharpie)