Amo mi trabajo con un amor fanático y pervertido, como un asceta el cilicio que le rasca el vientre.
...gente que se rasca las vestiduras... (en lugar de rasga).
Aparta un amor viejo con un amor nuevo, como un clavo saca otro clavo.
De vez en cuando la vida nos gasta una broma y nos despertamos sin saber qué pasa, chupando un clavo sentados sobre una calabaza