La perfección es muerte; la imperfección es el arte.
Las máquinas son cada vez más eficientes y mejores, por lo que queda claro que la imperfección es la grandeza del hombre.
Apoyó la mejilla contra el borde de la bañera y sintió cómo el frío le mordía la piel. Era tan hermosa. Allí, flotando en la superficie del hielo. Los lazos que los unían aún seguían vivos. Nada había cambiado. Nada era diferente. Dos de la misma naturaleza.
¡Hay suficiente chocolate para llenar cada bañera del país entero y todas las piscinas también!