Pushkin, tan aficionado a reír, a medida que yo leía se iba poniendo cada vez más sombrío, y al acabarse la lectura exclamó con desesperación: ¡Dios mío, qué triste es nuestra Rusia! En aquel momento me di cuenta de la importancia que podía tener todo cuanto saliera directamente del alma, y, en general, todo cuanto poseyera una verdad interior.
El liderazgo está directamente relacionado con la derrota. Porque es ahí cuando se verifica la consistencia del conductor. Una de las claves que tiene que tener un líder, es que necesita ser querido para ganar, y no ganar para ser querido.
La mayor amenaza a nuestra democracia no viene de aquellos que abiertamente se oponen a nosotros, sino de aquellos que lo hacen en silencio junto a nosotros.
La pregunta no es si los israelíes quieren exterminar a los palestinos. Ellos lo están haciendo abiertamente