Tenemos que aprovechar cuando la suerte está de nuestro lado y hacer todo lo posible por ayudarla, de la misma manera que ella nos está ayudando
En el arte individual de la guerra, también sucede que un adversario pierda el ritmo en el combate y empiece a derrumbarse. Si no aprovechar esta oportunidad, el adversario se recobrará y empezará a presentarte dificultades. Es esencial seguir con atención cualquier pérdida de posición por parte de tu contrincante, para impedirle que se recupere.