Allí donde hay más sensibilidad es más fuerte el martirio.
Tengo que escoger lo que detesto: o el sueño, que mi inteligencia odia, o la acción, que a mi sensibilidad repugna; o la acción para la que no nací, o el sueño para el que no ha nacido nadie. Resulta que como detesto a ambos, no escojo ninguno, pero, como alguna vez tengo que soñar o actuar, mezclo una cosa con la otra.
Los hombres se vuelven más civilizados no en proporción a su deseo por creer, sino en proporción a su buena disposición a dudar.
Hay pruebas más que suficientes de su connivencia con los asesinos. Usted y su Gobierno, como interlocutores del mal llamado proceso de paz, no ponen a disposición judicial y policial los datos e informaciones que permitan la detención de los terroristas con los que se han sentado a hablar, como Josu Ternera
Lo más grave que ha sucedido en el siglo XX es la aceptación social del aborto provocado.
La fe no es la simple aceptación de unas verdades abstractas, sino una relación íntima con Cristo que nos lleva a abrir nuestro corazón a este misterio de amor y a vivir como personas que se saben amadas por Dios
(Los españoles) tienen cierta inclinación al masoquismo histórico.
Dios ha creado al hombre como una animal sociable, con la inclinación y bajo la necesidad de convivir con los seres de su propia especie, y le ha dotado, además, de lenguaje, para que sea el gran instrumento y lazo común de la sociedad.
Una ventaja de las buenas acciones es que elevan el alma y la predisposición para hacer otras mejores.
Mi consejo para todos aquellos que tienen el tiempo y la predisposición para ocuparse de la lengua internacional sería: apoyad al esperanto con lealtad
La vanidad es la ciega propensión a considerarse como individuo no siéndolo.
La propensión al imperialismo es una de las fuerzas elementales de la naturaleza humana, lo mismo que la ambición de poder. Unas veces se trata del imperialismo del dólar; otras, de un imperialismo religioso o de un imperialismo artístico. Pero es siempre un signo de la fuerza vital del hombre. Mientras uno vive es imperialista; cuando ha muerto, ya no lo es...
Si las lágrimas son efecto de la sensibilidad del corazón, ¡desdichado de aquel que no es capaz de derramarlas!
El recuerdo es un veneno que se forma en nuestra alma y va aniquilando la sensibilidad del corazón.
Para los que quieren cantar, siempre habrá una melodía a su disposición en el aire.
El disfrute del arte y la literatura supone una cierta disposición y la sensibilidad por parte del público.
Entiendo que un artista es alguien que, entre el silencio de los demás, utiliza su voz para decir algo, y que tiene la obligación que esto no sea algo inútil sino algo que dé un servicio a los hombres En su discurso de aceptación de la nominación como doctor honoris causa por la Universidad de Barcelona en 1979.
La antigüedad y la aceptación general de una opinión no es garantía de su verdad.
Dios ha creado al hombre como un animal sociable, con la inclinación y bajo la necesidad de convivir con los seres de su propia especie, y le ha dotado, además, de lenguaje, para que sea el gran instrumento y lazo común de la sociedad.
La mente requiere alguna relajación, ya que no puede ser siempre su inclinación hacia la preocupación y la faena
La mayoría de las cosas que nos pasan, si se piensa, vienen y van sin dejar rastro, como si en realidad no importaran mucho y esa predisposición para olvidarlas fuera nuestra manera de perdonar que nos hayan distraído de las cosas que sí merecían atención. Sin embargo hay unos pocos momentos escogidos en la vida qye según los estás viviendo ya sabes que los vas a recordar para siempre
La fe y la duda no tienen mucho que ver con el intelecto ni con el carácter. Son estados de espíritu. Por eso no son constantes, y siempre existe una predisposición hacia uno u otro de ellos. La experiencia personal ha convertido a más de un creyente en escéptico y a más de un escéptico en creyente.
La propensión al imperialismo es una de las fuerzas elementales de la naturaleza humana, lo mismo que la ambición de poder. Unas veces se trata del imperialismo del dólar; otras, de un imperialismo religioso o de un imperialismo artístico. Pero es siempre un signo de la fuerza vital del hombre. Mientras uno vive es imperialista; cuando ha muerto, ya no lo es...
...la propensión habitual de la humanidad hacia lo maravilloso, y que aunque esta inclinación pueda, en ciertos intervalos, ser frenada por el saber y por sentido común, no puede radicalmente extirparse de la naturaleza humana.