El militar es una planta a la que hay que cuidar con esmero para que no dé sus frutos.
... Esdras vemos que éste se esmeró no sólo en investigar la ley de Dios, sino también en embellecerla;...
¿Cómo puede haber cansancio cuando está presente la pasión? Oh, no suspires con pesadez por la fatiga: ¡Busca la pasión, búscala, búscala!
La mosca debe ser tomada como el símbolo de la impertinencia y la audacia; porque en tanto que los demás animales le huyen al hombre más que a otra cosa, y corren antes que él se les acerque, la mosca se posa sobre su nariz misma.
La belleza ha terminado por recurrir a la verborrea El color prohibido, 1951
La tempestad, sin embargo, amenazaba y estaba próxima a estallar. Una nimiedad la desencadenó.
Que como la buena ley es superior a todo hombre, las que dicte nuestro Congreso deben ser tales que obliguen a constancia y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia, y de tal suerte se aumente el jornal del pobre, que mejore sus costumbres, aleje la ignorancia, la rapiña y el hurto.
Desde el descubrimiento empezó la malicia a perseguir unos hombres que no tuvieron otro delito que haber nacido en unas tierras que la naturaleza enriqueció con opulencia y que prefieren dejar sus pueblos que sujetarse a las opresiones y servicios de sus amos, jueces y curas.
En María se realiza plenamente el Evangelio. Ella es la primera cristiana, anuncio y don de Cristo su hijo, plenitud de beatitudes, imagen perfecta del discípulo de Jesús.
Dos tiernísimos amantes que se unen en matrimonio, rara vez se encuentran, al cabo de muy pocos días, aquella plenitud de felicidad que su fantasía les prometía; porque son muy pocos los tiernísimos amantes que sepan o puedan descubrir en el alma de su amado aquella variedad que es imposible hallar en su cuerpo
Lo que más necesitan las democracias es que los electores acudan a votar con la misma profusión con que se presentan los candidatos.
Hasta donde podía ver, el mundo entero desplegaba la misma exuberante riqueza que el valle del Támesis. Desde cada colina a la que yo subía, vi la misma profusión de edificios espléndidos, infinitamente variados de materiales y de estilos.
Toda la ciencia no es más que un refinamiento del pensamiento cotidiano.
No, no, repito, la castidad no es una virtud, no es más que una convención que tuvo su origen en un refinamiento del libertinaje.
El catolicismo, judaísmo latino, salpicó de un hollín indeleble la exuberancia del Mediterráneo. ¿Cómo pudo <<florecer>> en sus riberas bañadas de un sol divino? El cristianismo es una reacción contra el sol y en su vertiente católica un ataque contra él que merece un capítulo aparte.
Si los espectáculos cultos ponen ante mis ojos un mundo de inmoralidad y una exuberancia de lujo que ciega mis ojos al tocar al corazón, hoy tengo derecho a mis corridas de toros.
La difusión del conocimiento y la educación ha enseñado muy poco a la humanidad sobre el autodominio, y aún menos sobre el arte de la convivencia
La educación y la difusión del conocimiento deben asumir una forma que permita a cada estudiante absorber todo lo que desarrolle su propio genio, para que no se frustre. La misma perspectiva se aplica al genio de los pueblos en su conjunto.