¿Quién es un hombre pobre? El que desorientado y desvalido, no tiene criatura, ni Dios, ni cuerpo, ni alma.
Mi cazador de libélulas, ¿hasta donde se me habría extraviado hoy?
Por la soberbia y vanidad se han extraviado muchos, llegando a veces a padecer ceguera casi incurable
La disputa con Mourinho, su pregunta y mi respuesta de canalla, pasó a la posteridad. Somos conscientes de que fue un error de ambos y ya está olvidado
Si, dijo. Yo le jodí y el me jodio, Es lo justo, ¿no?. El chico aún estaba callado, serenamente incrédulo. No, continuó Sylder, no he olvidado la cárcel. Crees que porque me arrestaran eso echa todo a perder, ¿no?. Yo no. Es su trabajo. Es por lo que les pagan. Arrestar a gente que rompe la ley. Pero yo no bromeo sobre romper la ley, yo he hecho un modo de vida de ello.
Desde entonces, el recuerdo de León fue como el centro de su hastío; chisporroteaba en él más fuerte que en una estepa de Rusia, un fuego de viajeros abandonado en la nieve.
No se llega a viejo por haber vivido cierto número de años. Uno llega a viejo porque ha abandonado su ideal. Los años arrugan la piel, renunciar al ideal arruga el alma.
Mi cazador de libélulas, ¿hasta donde se me habría extraviado hoy?
La muerte es misericordiosa, ya que de ella no hay retorno; pero para aquel que regresa de las cámaras más profundas de la noche, extraviado y consciente, no vuelve a haber paz.
Una persona que ve la vida a los 50 años igual a los 20, ha desperdiciado 30 años de vida.
Soltero: un hombre que ha desperdiciado la oportunidad de hacer desgraciada a una mujer.
Tengo también mucho de qué arrepentirme, pero me consuela pensar que es un sentimiento que dura más que la reflexión y, aunque me desazona haber malgastado tiempo, esa precariedad es lo que, al fin y al cabo, ha terminado abonando mi poesía.
El día mas malgastado de todos, es uno sin sonrisas.
Me subo a la moto y atravieso las calles en donde gente más extraña que tú y que yo se prepara para pasar un sábado divertido, un sábado a la altura de sus expectativas, es decir un sábado triste y que no llegará jamás a encarnarse en lo que fue soñado, planeado con minuciosidad, un sábado como cualquier otro, es decir un sábado peleón y agradecido, bajito de estatura y amable, vicioso y triste.
El reto de la sociedad civil es superar este círculo vicioso de vivir con dictaduras disfrazadas de democrácia, capaces de cualquier cosa para mantenerse en el poder.
Ya hemos indicado, por otra parte, que el favorecer la irrupción de los maketos es fomentar la inmoralidad en nuestro país; porque si es cierto que las costumbres de nuestro pueblo han degenerado notablemente en ésta época, débese sin duda alguna a la espantosa invasión de los maketos, que traen consigo la blasfemia y la inmoralidad.
Estoy convencido, de que si los esfuerzos por divorciar la política de la religión no se hubiesen hecho como se hicieron, la política no habría degenerado como con frecuencia ocurre... He conocido a muchos hombres religiosos que eran políticos disfrazados. Yo mismo, que tengo la apariencia de político, soy, de corazón, un hombre religioso.
Aquella conversación me estaba interesando cada vez más. Yo era igual de depravado que los demás jóvenes de mi edad, y el carácter abyecto de mi propósito me importaba un ardite ahora que se habían despertado el amor propio y todas las pasiones que se mezclan en este tipo de romances.
El deseo masculino es naturalmente explicable, pero el femenino es culturalmente depravado
Soy lo que tu quieras pero sinvergüenza no soy.
Cuando A molesta o hiere a B con el pretexto de salvar o mejorar X, A es un sinvergüenza
Quien se desploma desde lo alto de una montaña no corre tanto peligro como quien se hunde en el golfo del amor
El golfo eres tú, que sabes lo que tes estás llevando, que has puesto la mano por todo y has convertido el Ayuntamiento en una casa de atracos. A mí nunca nadie me ha dado ni un duro, y tú, nada más llegar, lo primero que pones es la comisión.
Dios ausente las hojas se amontonan todo es abandono.
¿El deseo no es siempre el mismo, esté presente o ausente el objeto? ¿El objeto no está siempre ausente? No es la misma languidez: hay dos palabras: Pothos, para el deseo del ser ausente, e Himeros, más palpitante, para el deseo del ser presente.
Yo creo que la melancolía es el estado de locura del arte. De revelación e inspiración. Es Hamlet con la calavera en la mano.
No sabe qué es peor, un pasado irrecuperable o un presente que lo destruirá si lo observa con demasiada atención. Luego está el futuro. Puro vértigo.
Todo, entre los mortales, tiene el valor de los irrecuperable y lo azaroso El Inmortal
Porque, como es lógico, no vamos a decir aquí que el Cristianismo sea el único culpable de todas esas miserias. Es posible que algún día, desaparecido el Cristianismo, el mundo siga siendo igualmente miserable. Eso no lo sabemos; lo que sí sabemos es que, con él, necesariamente todo ha de continuar igual
El hombre debe ser juzgado por la imagen social que proyecta de sí mismo -su respetabilidad- y por la imagen interior en que se contempla -su idealismo-. La moral que acabamos de describir no ha desaparecido aún, ni mucho menos. Pero no es la propia de nuestro tiempo y los jóvenes tienden a apartarse de ella.