El tiempo no es una cuerda que se pueda medir nudo a nudo, el tiempo es una superficie oblicua y ondulante que sólo la memoria es capaz de hacer que se mueva y aproxime.
El estanque está revuelto. Hay olas en su superficie. Los sauces están embozados en hojas y viento. El almiar proyecta su imagen ondulante e inmutable sobre el estanque. En torno al almiar, las ranas arrastran sus vientres blancos entre la hierba.
El estanque está revuelto. Hay olas en su superficie. Los sauces están embozados en hojas y viento. El almiar proyecta su imagen ondulante e inmutable sobre el estanque. En torno al almiar, las ranas arrastran sus vientres blancos entre la hierba.
El tiempo no es una cuerda que se pueda medir nudo a nudo, el tiempo es una superficie oblicua y ondulante que sólo la memoria es capaz de hacer que se mueva y aproxime.