También el jugador es prisionero de otro tablero de negras noches y de blancos días.
Aquellos días de los primeros combates de ajedrez, el tablero me seducía como quizá no me haya vuelto a seducir posteriormente. Es raro el ajedrecista principiante que no haya vivido un periodo así de atracción pasional por el tablero.
Un escritor es una persona con ideas simples y tener eso presente. No es una gran mente, no es un gran pensador, no es un gran filósofo, es un contador de historias.
En la actualidad la relación con el contador debe ser tan íntima y estrecha, y casi tan parecida, como la que se tiene con el médico personal.
Ser bueno con otras personas es de hecho uno de los principios fundamentales de la Cristiandad (en contraste con aquellos cuyos principios están más en el estilo de 'mata a todo aquél que no huela mal y no responda por el nombre de Mahoma').
Existe un contraste repugnante en Inglaterra entre la esclavitud de la mujer y la superioridad intelectual de las mujeres escritoras