¿Sabes lo que te puede acontecer mañana? Ten confianza, pues, de lo contrario, no dejará el infortunio de justificar tus temores. No te apegues a nada. No interrogues los libros ni a los hombres: él destino es inescrutable.
Para vencer el infortunio nos queda el amor a Bolivia. Ese amor a Bolivia hará milagros, a despecho de los anti bolivianos.