No opto ni por literatura ni por la vida, sino trato de ir y venir de la literatura a la vida, de hacerme mejor lector en la medida en que vivo mejor y vivo más, y de hacerme mejor vividor en la medida en que la lectura ilumina mi vida
No se recuerda que ningún ser humano haya conseguido una felicidad perdurable mediante el convencimiento de que está en mejor situación que otros seres.
Claro que las hormigas son distintas. Tienen una obra de ingeniería maravillosa y perdurable en la cual trabajar: el hormiguero.
Nuestra raza es resistente por su linaje.
El que no de consejos, no llega a viejo
Lo que intento es escribir con recursos de buena ley, sin trampas. Cualquier escritor, haga lo que haga, tiene que tener convicción. La novela es ficción y hay un momento en que uno que ya es perro viejo no se lo cree. Tener la capacidad de decir: no, esto no me lo creo, ésa es la dignidad del escritor, exigirse a uno mismo.
Tenemos que formar hombres capaces de decir y hombres capaces de hacer, y en este caso se trata de formar, en lo posible, el mayor número de hombres capaces de hacer, porque en este país, hasta ahora, no hemos formado más que hombres capaces de decir.
El acto de plantar durante las cálidas brisas de la primavera, requiere que ejerzamos esta dolorosa disciplina, porque si no lo hacemos, estaremos asegurando que en el próximo otoño, experimentaremos el mayor dolor del arrepentimiento. La diferencia es que el valor de la disciplina pesa gramos, y el del arrepentimiento toneladas.