Todos los errores humanos son fruto de la impaciencia, interrupción prematura de un proceso ordenado, obstáculo artificial levantado alrededor de una realidad artificial.
Si tuviera opinar sobre una virtud, me referiría a esta virtud: adaptarse a la exigencia, no desmoronarse, no quebrarse, persistir a pesar de la adversidad, enfrentar las dificultades sin pervertirse, pudiendo ser siempre el mismo, estar dispuesto a poner en riesgo lo que poseo, aceptar el reto, el desafío, el cambio, el ritmo, tolerar los picos de dolor, saber sufrir, volver a empezar aun cuando la interrupción se produce cerca del final, recobrar el estado original sin perder salud en la búsqueda de efectividad. No pueden quedar excluidos aquellos que no se convencieron: a aquellos que no se convencieron, hay que admitirles la diversidad, que es muy difícil, admitir que el otro no es como deseamos.
Las declaraciones del Presidente del Gobierno son un acto de cobardía sin límites y suponen una humillación más...se comporta como una persona que no cumple su principal obligación: someterse a la Ley... Ahora se mendiga una tregua
Soy un hombre sin piedad y no habrá tregua alguna. No hay nadie que lleve a cabo un rescate en el último minuto ni tienes la menor posibilidad de escapar. Esto no es un romántico relato de aventuras en que al final el villano cae vencido y el protagonista es condecorado y se casa con la chica. Por desgracia, esas cosas no ocurren en la vida real.