Nos resignamos al momento único y feliz. Preferimos perderlo, dejarlo transcurrir sin siquiera hacer el razonable intento de asirlo. Preferimos perderlo todo, antes que admitir que se trata de la única posibilidad y que esa posibilidad es solo un minuto y no una larga, impecable existencia
El ingeniero siempre se siente preocupado cuando sus planos empiezan a trocarse en piezas, en una máquina viva. ¿Qué resultará, qué aspecto tendrá? En los planos de impecable diseño todo puede estar en su sitio, más en cuanto se hacen las piezas, ateniéndose al proyecto, en unos sitios no encajan, en otros funcionan mal.
La única especie de mentira absolutamente irreprochable es la de mentir por mentir.
La atracción principal del servicio de las armas ha consistido y consistirá en su atractiva e irreprochable pereza.
El mundo lo llama placer. Mi tío lo colecciona -lo mantiene limpio y ordenado, en estantes protegidos, pero lo conserva de un modo extraño no para su propio deleite, no, eso nunca; más bien, porque proporciona combustible para la satisfacción de una curiosa lujuria. Me refiero a la concupiscencia del bibliotecario.
En la planta de tus pies traes arena de otro mar, te la limpio y me hago el loco...
En cuanto al recuerdo de Rodolphe, había descendido a lo más recóndito de su corazón, y allí permanecía, inmóvil y solemne, como momia regia en su subterráneo. De aquel gran amor embalsamado se escapaba un efluvio que, atravesándolo todo, aromaba con su ternura el inmaculado ambiente en que quería vivir.
Me encantan los de alto riesgo. No me gustan los pegajosos, los chicos cursis. Por lo general, son los chicos buenos, los que no te hará daño. Son muy caballerosos. Todo es perfecto y aburrido. Me gusta el riesgo, me gusta estar al borde del abismo. Esa es la emoción para mí
La felicidad es el final perfecto y fruto de la obediencia a las leyes de la vida
El hombre que en su casa gobierna sin tacha quiere también verse bien gobernado.
Resuélvete a hacer lo que debes, y haz sin falta lo que hayas resuelto.
Recordemos entre los socialistas utópicos a Spencer (1730-1814), fundador del socialismo agrario, y a William Thompson, que consideró al trabajo fuente única del valor y por tanto, si el obrero crea el valor con su propio trabajo, a él debe corresponderle el producto íntegro de éste.
Sólo el hombre íntegro es capaz de confesar sus faltas y de reconocer sus errores.
El hombre probo y pío es mitad santo y mitad pollito.
Bajó los ojos y luego quiso mirarme pero no pudo. Durante algunos minutos probó a dominar su emoción, pero de pronto me volvió la espalda, puso los codos en la barandilla del muelle y se deshizo en lágrimas
Me temo que debemos hacer honesto el mundo antes de poder decir honestamente a nuestros hijos que la honestidad es la mejor política
Pensándolo bien no hay otra solución para el progreso del hombre que un honesto día de trabajo, las decisiones tomadas diariamente, las expresiones generosas y las buenas acciones del día.