Pues para organizar la gran producción sin patronos es preciso en primer lugar, destruir la organización mercantil de la economía social y sustituirla por la organización comunal,...
La narración, en general, establece en la experiencia caótica y confusa que tenemos de la vida la sensación de una linealidad, de una causalidad. Uno podría tomar esa metáfora para decir que la política estatal establece ese tipo de tradiciones de organizar un sistema de causalidades y que también podría encontrarse eso en el discurso periodístico.
La gente que crea cosas en nuestros días puede esperar ser perseguida por gente muy moralista que es incapaz de crear nada. No hay manera de medir el escalofriante efecto sobre la innovación que resulta de las amenazas impositivas, regulatorias y de persecución contra cualquier cosa que tiene éxito. Nunca sabremos cuantas cosas ha abortado nuestro gobierno en nombre de nuestra protección.
La imaginación es la capacidad de crear una idea, una imagen mental o una sensación de algo.
Una cosa es la doctrina de Cristo, apartada de todos los intereses de esta tierra, y otra cosa es esta misma doctrina practicada por la iglesia, brutalmente materialista desde que se empezó a constituir como potencia.
¿Desde cuándo los socialdemócratas se dedican a organizar naciones, a constituir naciones, a crear naciones?
Mi vocación es más en la composición que cualquier otra cosa realmente, la construcción de armonías con la guitarra, orquestar la guitarra como un ejército, un ejército de guitarras.
Los tecnócratas económicos podrán estructurar una reforma fiscal aquí, una nueva ley de seguridad social por allá o un régimen modificado de cambio de divisas en alguna otra parte, pero en realidad nunca podrán permitirse el lujo de una tabla rasa sobre la que construir, en su máximo esplendor; el marco completo de sus políticas económicas favoritas.