No hay nada más terrible, insultante y deprimente que la banalidad.
Recomendar sobriedad al pobre es grotesco e insultante a la vez. Es como decir que coma poco al que se muere de hambre
Lo más ofensivo que pueda lanzarte a la cara tu peor enemigo no se compara con lo que tus amigos más íntimos hablan de ti a tus espaldas.
La habitual indiferencia de que alardeaban los detectives de homicidios quedaba superada por la emoción del momento. Me sorprendió su apasionamiento. No comprendía exactamente si aquella atrocidad por sí sola había conmovido sus sentimientos o si la naturaleza religiosa del ofensivo objeto contribuía a su reacción.
No seas compañero de los malos ni calumniador de los buenos.
Si la culebra pudiese hablar, sería el mayor calumniador del león. Los hombres reptiles por eso persiguen con su lengua a las almas superiores
No nos dejes ser tan prudentes. Que queramos contentar a todos. Tu palabra es hiriente como espada de dos filos. Además de las bienaventuranzas, también pronunciaste las maldiciones. Es un texto subversivo.
Señor, tenemos la costumbre de acostumbrarnos a todo. Aun lo más hiriente se nos oxida. Quisiéramos una sensibilidad no cauterizada, para maravillarnos y sublevarnos. Señor, que no nos acostumbremos a ver injusticias, sin que se nos encienda la ira, y la actuación.
La más desarmada ternura, así como el más sangriento de los poderes, necesitan la confesión.
La anarquía inevitablemente provocará tiranía. La tiranía es el semillero de la revolución. Y así el ciclo sangriento se cerrará, a menos que podamos hallar un remedio para la locura que nos aflige.
La esclavitud más denigrante es la de ser esclavo de uno mismo.
La lengua maldiciente es indicio de mal corazón.
Del maldiciente al malhechor sólo media la ocasión
Del maldiciente al malhechor sólo media la ocasión
La lengua maldiciente es indicio de mal corazón.