La justicia no es más que el sueño de algunos imbéciles. La injusticia es el pensamiento mismo de Dios.
Permitir una injusticia significa abrir el camino a todas las que siguen
Cuando la arbitrariedad y la ilegalidad se atreven a levantar la cabeza con insolencia e impudicia, es siempre un signo seguro de que los llamados a defender la ley no han cumplido con su deber.
Así son los viejos: les complace pensar en la arbitrariedad como forma de los tiempos mejores.
Lo que hago, es lo que me pide el cuerpo: nada más. Yo estaba aquí, esto era un atropello y me negué a permitirlo. Los responsables han convalidado que tengo la razón, los bien intencionados, los que fueron herramientas menos comprometidas.
El reclutamiento de cada granuja errante... para llevar fuego y espada y ultraje y todo atropello concebible entre los súbditos más pacíficos del rey de Francia. Las narraciones de las crueldades y abominaciones de esta cruzada son mucho más terribles de leer que cualquier narración del martirio de los cristianos a manos de los paganos.
Proteger el trabajo es enjugar lágrimas, consolar dolores, arrancar víctimas al vicio, al crimen y a la muerte
¿Para qué quiere usted vernos? Nosotros no sabemos absolutamente nada con respecto a lo ocurrido. Bueno, es que me imagino que su visita a esta casa se halla relacionada con el crimen cometido en nuestra barriada... ¿O es que desean comprobar si nos hallamos al corriente en cuanto al pago de la licencia del televisor?
La crueldad es uno de los placeres más antiguos de la humanidad.
Es difícil mantener la crueldad necesaria que nos permita ser implacables en nuestros juicios. La ternura de los recuerdos se va extendiendo por todas partes; si nos diluimos en ella será imposible mirar a alguien con los duros ojos de la realidad.
Nuestras movilizaciones responden a la violencia, a la injusticia, y muchas veces tendrán que salirse de la ley. La esclavitud era legal. También las peonadas son legales y, como ella, una auténtica barbaridad
Lo que hice el año pasado es una grosería. Ganar 57 partidos seguidos en polvo de ladrillo, y 85 partidos de los 87 jugados, con 16 torneos ganados sobre 31, es una barbaridad que no voy a volver a repetir en mi carrera. Ni creo que en mucho tiempo alguien lo pueda igualar
La habitual indiferencia de que alardeaban los detectives de homicidios quedaba superada por la emoción del momento. Me sorprendió su apasionamiento. No comprendía exactamente si aquella atrocidad por sí sola había conmovido sus sentimientos o si la naturaleza religiosa del ofensivo objeto contribuía a su reacción.
La vanidad puede estar unida con un bien natural, pero la envidia supone siempre perversidad en el corazón.
El último grado de perversidad es hacer servir las leyes para la injusticia.
La experiencia médica enseña que de la inhibición sexual nacen la enfermedad, la perversión y la lascivia
El poder pervierte a quien lo ejerce -estas son pues las lecciones anarquistas de hoy: la eterna perversión de quienes ejercen el poder, sean quienes fueren, sean filósofos que se volvieron reyes o reyes con veleidades filosóficas.
Exigir la inmoralidad del individuo es querer perpetuar un error hasta el infinito.
Si el periodismo es todavía una fuerza ciega, la culpa es del periodista. No hay ningún sacerdocio más alto que el del periodista; pero, por lo mismo, no hay sacerdocio que imponga más deberes, y por lo mismo, no hay sacerdocio más expuesto a ser peor desempeñado. De ahí principalmente la inmoralidad del periodismo.
Las declaraciones del Presidente del Gobierno son un acto de cobardía sin límites y suponen una humillación más...se comporta como una persona que no cumple su principal obligación: someterse a la Ley... Ahora se mendiga una tregua
Sentirse fracasado es peor que sentirse humillado. De la humillación nace el coraje; del fracaso, el suicidio.
Tan sólo existe una forma de depravación humana: carecer de metas
Más Estados han perecido por la depravación de las costumbres que por la violación de las leyes.