Nunca una nación se ha arruinado comerciando.
Hay una cama, una pequeña mesa plegable, y armarios de madera de verdad. Esos elementos en combinación con fotografías de familiares y amigos le dan un aire acogedor y doméstico completa- mente arruinado por la fotografía enmarcada de Adolf Hitler que cuelga del mamparo. A Waterhouse le parece de un asombroso mal gusto hasta que recuerda que es un submarino alemán.
La fiesta se ha apagado, las luces del teatro ya no existen, estoy en la nada del circo no queda sino un traje raído cansado descolorido.
Es lo que sé de la crueldad de la paciencia. No hay paciencia más terrible que la paciencia de las trastornadas. He visto a dementes afanarse en tareas interminables: trasvasar arena de una taza perforada a otra, contar las puntadas de un vestido raído o las motas en un rayo de sol, rellenar con las sumas resultantes libros invisibles de contabilidad.
Nosotros nos diferenciamos inconciliablemente de todas las sectas socialistas, pues rechazamos todo internacionalismo, sea cual fuere, toda intervención del Estado en asuntos económicos. Decir que exista también en Italia un peligro bolchevique significa tomar por realidad algunos absurdos temores. El bolchevismo está derrotado
Un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después.