Los enemigos de la Patria, por consiguiente nuestros, están muy acordes en estas ideas: destruir la Nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar a la nación entera.
Los enemigos de la Patria, por consiguiente nuestros, están todos muy acordes en estas ideas; destruir la nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar a la Nación entera.
Un caballero debe ser cortés y nunca agresivo, próximo, pero jamás atrevido; matar pero nunca humillar; ningún signo de deshonestidad puede ser encontrado en su morada; su alimentación nunca es pesada; incluso el menor error es corregido, pero sin acusación. Así es la fuerza de la voluntad.
Desde 1987 he cuestionado la hipótesis del VIH/SIDA porque el VIH está latente y presente en sólo una de cada 500 células T en el SIDA, porque no es conducta típica de los retrovirus matar células y porque el SIDA se manifiesta en promedio unos 10 años después de que el virus ha sido neutralizado por anticuerpos.
Sino lo que es necio ante el mundo lo ha elegido Dios para deshonrar a los sabios; y lo que es débil ante el mundo lo ha elegido Dios para deshonrar a lo fuerte. Y lo innoble ante el mundo y lo despreciado lo ha elegido Dios, y lo que es nada, para aniquilar a lo que es algo.
El objeto de la guerra no es aniquilar a los que la han provocado, sino hacerles que se enmienden; no destruir a los inocentes y a los culpables por igual, sino salvar a ambos.
Sabemos quienes son los maniáticos homicidas. Son los que están bailando y cantando ahora. Debíamos invadir sus países, matar a sus líderes y convertirlos al cristianismo. No éramos tan escrupulosos cuando buscábamos a Hitler y su alta oficialidad. Bombardeábamos ciudades enteras, matábamos civiles entonces. Así es la guerra. Y esto es una guerra.
El fanatismo es a la superstición lo que el delirio es a la fiebre, lo que la rabia es a la cólera. El que tiene éxtasis, visiones, el que toma los sueños por realidades y sus imaginaciones por profecías es un fanático novicio de grandes esperanzas; podrá pronto llegar a matar por el amor de dios.