La clave para retener a cliente es la satisfacción de los cliente. Un cliente muy satisfecho se mantiene leal más tiempo, compra más, habla favorablemente acerca de la empresa y sus productos, presta menos atención a la competencia y es menos sensible al precio.
El médico puede enterrar sus errores, pero el arquitecto lo único que puede hacer es aconsejar a su cliente que ponga enredaderas.