Utilizaba la heroína porque nunca me vi capaz de afrontar bien la fama. Sabía que para ser feliz y hacer lo que quería, música, la fama era uno de los precios a pagar, y no me acostumbraba. Era más fácil meterse heroína y utilizar eso como una forma de distanciarse que afrontar la presión exterior.
Que la familia no tiene recursos para afrontar el pago de las tasas, evidentemente se pueden dar casos, pero no tener recursos pregunto una vez más ¿qué quiere decir? Que no se quieren dedicar recursos a eso en detrimento de otras posibilidades, de a usar recursos en otras cosas.
Solamente los débiles eluden la confrontación con hombres que no piensan como ellos. Ninguno de los estadistas de las grandes naciones occidentales rehúsan hablar con los dirigentes de los países comunistas. Nosotros no queríamos ser jamás gobernantes de un pueblo que tiene miedo de confrontar sus ideas con otras ideas
Es preciso soñar, pero con la condición de creer en nuestros sueños. De examinar con atención la vida real, de confrontar nuestra observación con nuestros sueños, y de realizar escrupulosamente nuestra fantasía.
Así, soltamos el timón al que tan largo tiempo nos habíamos aferrado y la barca frágil en la que flotábamos pareció, una vez libre de todo gobierno, apresurarse y encarar la proa hacia el oscuro abismo de las olas.
Tenga coraje de decir no. Tenga coraje de encarar la verdad. Haga una cosa justa porque es cierta. Estas son las llaves mágicas para vivir su vida íntegramente.
No existe la suerte. Sólo hay preparación adecuada o inadecuada para hacer frente a una estadística.
Resulta dificil hacer frente a los errores de la época: si los combatimos, nos quedamos solos; si cedemos ante ellos, no conseguimos ni honor ni alegría.
Cada civilización debe contender con una fuerza inconsciente que puede anular, desviar o revocar casi cualquier intención consciente de la colectividad.
El amante más dispuesto a arrostrar los peligros, es el preferido siempre. En el paseo, en la iglesia, en el teatro, las españolas hablan con los ojos a quien quieren; poseen este seductor lenguaje a la perfección.
Allí estaba yo, dispuesto a arrostrar todos los peligros, a desafiar todas las leyes divinas y humanas, a asesinar si fuera necesario y a meterme en complicaciones inextricables y horribles ( ¿Qué me importaba a mí? ), por una mujer de la que no sabía más que era tan hermosa como imprudente.
Porque estos periódicos tan celosos de la censura oficial se autocensuran cuando se trata del avisador; el columnista no debe chocar con la administración. Las doctrinas, los hechos, los hombres, se discriminan en función del aviso; así hay tabúes tácitos y se sabe que no se debe mencionar, que camino no hay que aconsejar, que cosas son inconvenientes.
El que quiera discutir con Cristina, yo le aconsejo: chocar con un tren cargado con piedras es más fácil
Un verdadero bello espíritu piensa más en las cosas que en las palabras; con todo, no desdeña los adornos del lenguaje, pero tampoco los solicita. La delicadeza de su estilo no disminuyen la fuerza; y se le podría comparar a aquellos soldados de César, que aunque estaban perfumados y atentos a su adorno, no dejaban de ser valientes y de combatir bien...
Nunca emplearemos más acertadamente nuestros vicios que en combatir a los unos y a los otros
El niño pobre ha de ocupar un puesto en la escuela, no según su condición y fortuna, sino según su capacidad. Ha de poder, si sus actitudes se lo permiten, seguir todos los grados, competir con el rico, ocupar un puesto a su lado y aún sobrepasarle.
Tercero, necesitamos animar a los niños a estudiar más matemáticas y ciencia, y asegurarnos de que estos cursos son lo bastante rigurosos para competir con otras naciones.
Vosotros os habéis atrevido a rechazar el relativismo moral, y a decir que hay héroes como Miguel Ángel Blanco, y canallas como el Che Guevara; y eso no está de moda decirlo.
Las perversiones parecen rechazar el completo esclavizamiento del ego del placer por el ego de la realidad. Exigiendo libertad instintiva en un mundo de represión, a menudo están caracterizadas por un fuerte repudio de ese sentimiento de culpa que acompaña a la represión sexual.
A mí me ganaba por la palabra, pero si hubiéramos acabado por llegar a las manos le juro a usted por mis muertos que lo mataba antes de que me tocase un pelo. Yo me quise enfriar porque me conocía la carácter y porque de hombre a hombre no está bien reñir con una escopeta en la mano cuando el otro no la tiene.
Todo acto es un disparo de revólver cerebral.
Tengo miedo de escribir, es tan peligroso. Quien lo ha intentado, lo sabe. Peligro de revolver en lo oculto y el mundo no va a la deriva, está oculto en sus raíces sumergidas en las profundidades del mar. Para escribir tengo que colocarme en el vacío.
Buscar a Dios es encontrarse con uno; si tienes fe, moverás el mundo
La proactividad forma parte de la naturaleza humana, y, aunque los músculos proactivos puedan encontrarse adormecidos, sin duda están en su lugar.
Me parece que, al discutir los problemas naturales, no se debería partir de la autoridad de los pasajes de la Escritura, sino de la experiencia de los sentidos y de las demostraciones necesarias. Porque la Sagrada Escritura y la naturaleza proceden igualmente del Verbo divino, aquélla como dictado del Espíritu Santo, y ésta como la ejecutora perfectamente fiel de las órdenes de Dios
Mantengo la norma de no discutir con mujeres. Son muy tramposas y siempre pierdo.
El público utiliza los clásicos de un país como un medio de contrarrestar el progreso del arte. Rebajan las obras clásicas a las categorías de autoridades. Las emplean a manera de garrotes para impedir la libre expresión de la belleza en nuevas formas.
La mejor manera de contrarrestar una emoción negativa es tener una positiva más fuerte.
La escala, hablando apropiadamente, no permite medir la inteligencia, porque las calidades intelectuales no son comparables y, por lo tanto, no pueden ser medidas por comparación.
Por cómo percibimos y acogemos a los otros, a los diferentes, se puede medir nuestro grado de barbarie o de civilización. Los bárbaros son los que consideran que los otros, porque no se parecen a ellos, pertenecen a una humanidad inferior y merecen ser tratados con desprecio o condescendencia.
Mañana tal vez tengamos que sentarnos frente a nuestros hijos y decirles que fuimos derrotados. Pero no podremos mirarlos a los ojos y decirles que viven así porque no nos animamos a pelear
Todos podemos pelear batallas de un solo día. Es cuando añadimos la carga para dos días incontrolables, ayer y mañana, cuando nos agobiamos