Olvido es señal de menosprecio y por lo tanto, causa de enojo.
Las acciones que ni mudan ni alteran la verdad de la historia, no hay para que escribirlas, se han de redundar en menosprecio del señor de la historia.
No me atemorizan ni los gritos sediciosos, ni las amenazas. desprecio hoy la muerte como la he despreciado en los campos de batalla. No puedo ni debo seguir esta discución iniciada en la forma que ha tomado. Si queréis discutir seriamente la situación del país, y buscar el remedio que conviene adoptar, designad a algunos individuos respetables con quienes pueda seguir tratando tan graves asuntos
Aquellos a quienes se condena al suplicio manifiestan a veces una fortaleza y un desprecio a la muerte que en realidad no es más que el temor a mirarla cara a cara; de modo que puede decirse que esa fortaleza y ese desprecio son para su ánimo lo que la venda es a sus ojos.
Prefiero los errores del entusiasmo a la indiferencia de la sabiduría.
No hay nada más duro que la suavidad de la indiferencia
Los que nacen con la conciencia superior de los destinos de su vida, nada los fascina ni embriaga, porque no sólo tienen el más profundo desdén por todos los poderes de la tierra, sino también, por cuanto pudiera desviarlos de su propia recta orientación.
La cabellera es para nosotras las mujeres un medio de expresión, no es cierto que con una negra cabellera la mujer demuestra su altivez o su desdén
La autoestima no es tan vil pecado como la desestimación de uno mismo
La autoestima no es tan vil como la desestimación de uno mismo.
Otro demérito de los falsos problemas es el de promover soluciones que son falsas también. A plinio (historia natural, libro octavo) no le basta observar que los dragones atacan en verano a los elefantes: aventura la hipótesis de que lo hacen para beberles toda la sangre que, como nadie ignora, es muy fría.
Pensadlo bien. Cuando se trata de hacer votos va en ello la salvación; porque bien sabéis que los votos dan un nuevo mérito o demérito a nuestras acciones.
Cuando sobre los hombros de una clase productora, pesa la más dura opresión económica, se agrega aún el desprecio y el odio de que es víctima como raza, no falta más que una comprensión sencilla y clara de la situación, para que esta masa se levante como un solo hombre y arroje todas las formas de explotación.
No me atemorizan ni los gritos sediciosos, ni las amenazas. desprecio hoy la muerte como la he despreciado en los campos de batalla. No puedo ni debo seguir esta discución iniciada en la forma que ha tomado. Si queréis discutir seriamente la situación del país, y buscar el remedio que conviene adoptar, designad a algunos individuos respetables con quienes pueda seguir tratando tan graves asuntos
No hay nada más duro que la suavidad de la indiferencia
Nuestra sociedad no conoce prelación, codificaciones definitivas, centro, sólo estimulaciones y opciones equivalentes en cadena. De ello proviene la indiferencia posmoderna, indiferencia por exceso, no por defecto, por hipersolicitación, no por privación
La razón es el mayor enemigo que tiene la fe; nunca viene en ayuda de las cosas espirituales, sino que las más de las veces lucha contra la palabra divina, tratando con desdén todo lo que emana de Dios
En los bares que frecuentaba como vaquero estrella, la actitud distinguida implicaba un cierto y desafectado desdén por el cuerpo. El cuerpo era carne. Case cayó en la prisión de su propia carne.
La autoestima no es tan vil como la desestimación de uno mismo.
La autoestima no es tan vil pecado como la desestimación de uno mismo
Pensadlo bien. Cuando se trata de hacer votos va en ello la salvación; porque bien sabéis que los votos dan un nuevo mérito o demérito a nuestras acciones.
Otro demérito de los falsos problemas es el de promover soluciones que son falsas también. A plinio (historia natural, libro octavo) no le basta observar que los dragones atacan en verano a los elefantes: aventura la hipótesis de que lo hacen para beberles toda la sangre que, como nadie ignora, es muy fría.