Lo más irritante del mundo, aparte de la voz de mi suegra, es escuchar una flautita y un órgano. ¿No se dieron cuenta todavía de quién hablo? Ustedes son unos pelotudos, hablo de Sui Generis. Es mas, si tengo que elegir entre esos dos, elijo escuchar a mi suegra toda la vida.
Y hacía imposible aquella venganza que, por lo menos, podía tomar de improviso contra los otros. Un ángel, para una mujer, es siempre más irritante que una bestia.
Nos resulta bastante molesto tener que dialogar de una manera agresiva con el público. Invisible y creo que gran parte del público necesita cortar con el diálogo provocativo, negligente y chanta. Por eso no vamos a tocar ni nada pesado ni nada liviano. Vamos a tocar lo que queremos, y ustedes van a escuchar lo que vinieron a escuchar en este concierto. Vamos a tocar Suspensión.
El ingenio, si es de otros, es siempre molesto
No hay ninguna garantía de que la otra vida sea menos exasperante que esta.