Julio. ¿Quién sino la fuente de todas las leyes, el romano pontífice? A él corresponde, ciertamente, abolir la ley, interpretarla, ampliarla, restringirla, en la medida en que le parezca conveniente a sus intereses.
El primer paso para solucionar las crisis económicas y financieras es abolir el Premio Nobel de Economía
La cuestión sería combatir las causas y no conformarse con tener éxito en suprimir efectos. Esta revolución fracasará si no logra sacudir el aislamiento espiritual de los indígenas, si no ¿para qué?
Soy feliz, Póstumo, con los besos de saludo que me das con un solo labio: pero podrías suprimir la mitad de esa mitad. ¿Quiéres hacerme un favor más grande y verdaderamente inestimable? Guárdate esa mitad entera
La idea superior de disciplina que llevan en la sangre esos soldados, ¿No basta para invalidar su capacidad de equidad? Quien dice disciplina dice obediencia.
Lo malo está en que nuestra admiración es improductiva y en que si nos dedicamos a revocar lo que se cae, a hacer la limpieza de lo que construyeron, seremos ridículos ante nuestros hijos.
Cada civilización debe contender con una fuerza inconsciente que puede anular, desviar o revocar casi cualquier intención consciente de la colectividad.