Las guerras, para ser buenas, las han de encomendar a los dioses, aceptarlas los príncipes, justificarlas los filósofos y ejecutarlas los capitanes.
Sería una estulticia encomendar una gran hazaña a un hombre tímido, pues todas las cosas tienen la talla de quien las hace
La canción Dear John es algo así como el último email que enviarías a alguien con la que solías mantener una relación. Normalmente la gente escribe este último email a alguien y ellos dicen todo lo que quieren decirles en persona, y normalmente no lo envían. Supongo que al poner esta canción en el álbum estoy pulsando enviar.
El hombre debe poner fin a atribuir sus problemas al entorno, y aprender de nuevo a ejercer su voluntad, su responsabilidad personal en el ámbito de la fe y la moral.
Un líder que no duda antes de enviar a su nación a una guerra, no es apto para serlo
El que pretende dirigirse a la humanidad, o es un tramposo o este equivocado. La pretendida comunicación se cumple o no; el autor no es responsable, ella se da o no por añadidura. El que quiera enviar un mensaje -como se ha reiterado ya tantas veces- que encargue esta tarea a una mensajería.
El poder y la influencia de una estrella de cine es curioso: no me preguntes si lo obtuve o la gente me lo dio. Simplemente porque seas una estrella de cine la gente puede empoderar tus derechos y privilegios especiales.
La delegación efectiva representa tal vez el mejor indicador de la administración efectiva, simplemente porque es fundamental para el crecimiento personal y organizacional.
Cuando una necesidad posee un carácter suficientemente universal y suficientemente uniforme como para que sea propio llamarle necesidad pública, puede convenir a todos los hombres que forman parte de un conglomerado (comuna, provincia o nación), proveer a la satisfacción de esa necesidad por medio de una acción o una delegación colectiva.
Ya es hora de dejar de hacer lo conveniente para empezar a hacer lo correcto
La poesía surge de la necesidad, es tu subconsciente. Es imposible hacer un poema con voluntad. en el momento de escribir hay que olvidar todo lo que conoces, y el lector también tiene que olvidarlo todo para dejar que lo que lee le afecte.