Cuando a un tigre lo acorralas, no se rinde, pelea. Y eso es lo que están haciendo: tratando de acorralar a un tigre.
La peor táctica es atacar a una ciudad. Asediar, acorralar a una ciudad sólo se lleva a cabo como último recurso.
Un gobierno nuevo tiene que deslumbrar y sorprender; cuando deja de brillar, cae.
Quiero decirles la verdad de una humilde mujer del pueblo ¡La primera mujer del pueblo que no se dejó deslumbrar por el poder ni por la gloria!