En realidad, es un libro que me lo han preparado. Es una entrevista imaginaria de un colaborador mío y entonces se contesta con trozos de mi obra, con declaraciones, yo no he hecho nada. No puedo, ¿cómo voy a hacer?
Las grandes obras se deben a fuerzas colectivas excitadas por fuerzas individuales: manos inconscientes allegan materiales de construcción; sólo cerebros conscientes logran idear monumentos hermosos y durables. De ahí la conveniencia de instruir a las muchedumbres para transformar al más humilde obrero en colaborador consciente.
El lenguaje existe sólo cuando es oído y hablado; el oyente es un participante indispensable.
Los mercados nunca generan automáticamente confianza, cooperación o acción colectiva para el bien común. Todo lo contrario; la naturaleza de la competencia económica implica que el participante que rompe las leyes triunfa al menos a corto plazo- sobre sus competidores con más sensibilidad ética.
He trabajado como ayudante de camarero en la vida real. Tengo algunos callos que no son sólo de bocadillos en la mesa de los actores del departamento técnico
Nuestras imperfecciones nos ayudan a tener miedo. Tratar de resolverlas nos ayuda a tener valor
Con frecuencia, los países en vías de desarrollo se encuentran atrapados entre 2 opciones desagradables: la suspensión de pagos, que conlleva el temor al colapso de la economía, o la aceptación de ayuda (préstamos), que conlleva la pérdida de la soberanía económica.
Cuando un funcionario público gasta en provecho propio cinco francos más, es porque un contribuyente gasta en provecho propio cinco francos menos. El gasto del funcionario se ve, porque se verifica; pero el del contribuyente no se ve, porque, ¡ay!, se le impide realizarlo.
El contribuyente es una persona que trabaja para el Gobierno, pero sin haber hecho las oposiciones a funcionario.