No hay cosa más censurable que un amigo que no sea sincero
Que el tener ganancias es reprochable es un concepto socialista. Yo considero que lo verdaderamente reprochable es tener pérdidas
Pienso que modificando el capitalismo, sabiamente, puede volverse probablemente más eficiente para alcanzar los fines económicos que todos los sistemas alternativos hasta el momento, pero este sistema es, en muchos aspectos, extremadamente criticable
No seas desproporcionado en tus ambiciones. Pretende sólo aquello que puedas obtener con toda seguridad. Sitúata sólidamente en el puesto que te corresponde. Una persona en un puesto superior a su capacidad es un espectáculo deplorable
Qué me importa a mí el deplorable parloteo de las caóticas y planas cabezas norteamericanas.
Toda oposición contra el supremo poder legislativo, toda incitación que haga pasar a la acción el descontento de los súbditos, todo levantamiento que estalle en rebelión, es el delito supremo y más punible en una comunidad, porque destruye sus fundamentos.
Toda la justicia social descansa en estos dos axiomas: El robo es punible y el producto del robo es sagrado.
Hay algo reprobable en mostrarse demasiado cariñoso cuando unos se va, como para que lo echen de menos.
No avergonzarse de querer aprender las cosas que no sabes: saber algo es loable, reprobable no querer aprender
La nuestra será una democracia sin terrorismo, pero no una democracia sin memoria: la memoria de las victimas, de cada una de las 829 víctimas mortales y sus familias, de tantos heridos que padecieron el injusto y aborrecible golpe del terror, nos acompañará siempre
El hombre nació en la barbarie, cuando matar a su semejante era una condición normal de la existencia. Se le otorgo una conciencia. Y ahora ha llegado el día en que la violencia hacia otro ser humano debe volverse tan aborrecible como comer la carne de otro.
(..) Ahora empezaba a darme cuenta de cuánto más feliz era esta vida, con todas sus miserias, que la existencia sórdida, maldita y abominable que había llevado en el pasado.
Todo para nosotros y nada para los demás parece haber sido la máxima abominable de los amos de la humanidad en todas las edades del mundo.
La omisión del bien no es menos reprensible que la comisión del mal.
¿No es la ignorancia más reprensible pensar que uno sabe lo que no sabe?
¡Cielos! me decía, ¿Es posible que esos dos seres tan amables y amantes no sean más que dos duendes, acostumbrados a encarnarse en toda suerte de formas para burlar a los mortales? ¿Es posible que no sean más que dos brujas o, cosa más execrable aún, dos vampiros a quienes les está permitido animar los cuerpos odiosos de los ahorcados del valle?
... encuentro que el género humano es execrable en general y los hombres, por su orgullo y desmedida ambición, en particular.