Un hombre debe vivir como una gran llama brillante y quemarse tan intensamente como pueda. Al final se quema. Pero esto es mucho mejor que una pequeña llama mediana
... como pasa fatalmente con todos los matrimonios jóvenes que se han amado intensamente una vez siquiera, la reconciliación llegó, tanto más efusiva cuanto más infames fueran los agravios.