Jackie Chan, Jet Li y Bruce Lee son mis maestros, son la inspiración para mi trabajo. Bruce Lee era un caza pesado que lanzó golpes duros. Jackie se mueve muy rápido y utiliza una gran cantidad de golpes cómicos, y Jet Li es muy fluido. He tratado de combinar todos sus estilos añadiendo mi propio estilo.
Es fácil reconocer si el hombre tiene gusto: la alfombra debe combinar con las cejas.
Si el hombre fracasa en conciliar la justicia y la libertad, fracasa en todo.
Política es eso: el arte de ir levantando hasta la justicia la humanidad injusta; de conciliar la fiera egoísta con el ángel generoso; de favorecer y de armonizar para el bien general, y con miras a la virtud, los intereses.
La estrategia es el uso del encuentro para alcanzar el objetivo de la guerra. Por lo tanto, debe imprimir un propósito a toda la acción militar, propósito que debe concordar con el objetivo de la guerra. En otras palabras, la estrategia traza el plan de la guerra y, para el propósito aludido, añade la serie de actos que conducirán a ese propósito.
Tenemos el deber de ser responsables ante el pueblo. Ser responsables ante el pueblo significa que cada palabra, cada acto y cada medida política nuestros deben concordar con los intereses del pueblo, y si cometememos errores, debemos corregirlos.
El mayor error del marxismo y el más inhumano consiste en no ver al hombre más allá de la clase y en ver, en cambio, a la clase más allá del hombre; en reducir a éste hasta su célula más ínfima, hasta su más recóndita experiencia espiritual, a una función subordinada a la clase, y, en cambio, someter y ordenar su contemplación y su creación.
Los internautas saben que hay que ordenar el espacio que es Internet, que es el medio más fabuloso para la difusión del conocimiento, de la información, de la cultura y de la comunicación. Pero estamos un poco por detrás de otros países europeos y debemos encontrar una manera razonable para todos, tanto usuarios como los que generan los contenidos, porque si no nos vamos a quedar sin contenidos
El que sabe corresponder a un favor recibido es un amigo que no tiene precio.
Apresurarse demasiado a corresponder un favor constituye una especie de ingratitud.
Cada vez que se sentía descorazonado se decía que lo que estaba haciendo, por muy incómodo que le resultara, era mejor que quedarse en la anterior situación, sin queso. En lugar de conformarse con que las cosas sucedieran, comenzaba a tomar el control.
Cuando las cosas no quieren conformarse con nosotros, nosotros debemos conformarnos con ellas.
Inútil es el trabajo de quienes se esfuerzan haciendo cálculos para cuadrar el círculo
Cuando una necesidad posee un carácter suficientemente universal y suficientemente uniforme como para que sea propio llamarle necesidad pública, puede convenir a todos los hombres que forman parte de un conglomerado (comuna, provincia o nación), proveer a la satisfacción de esa necesidad por medio de una acción o una delegación colectiva.
En verdad, si se considera por una parte el arte, la riqueza, el inmenso número de los medios puestos en acción, y por otra parte el fruto insignificante del resultado, es preciso convenir que la vida es un mal negocio, un negocio en el que los beneficios ni siquiera cubren los gastos
Tenemos el deber de ser responsables ante el pueblo. Ser responsables ante el pueblo significa que cada palabra, cada acto y cada medida política nuestros deben concordar con los intereses del pueblo, y si cometememos errores, debemos corregirlos.
Decir lo que sentimos, sentir lo que decimos, concordar las palabras con la mente.
Política es eso: el arte de ir levantando hasta la justicia la humanidad injusta; de conciliar la fiera egoísta con el ángel generoso; de favorecer y de armonizar para el bien general, y con miras a la virtud, los intereses.
Gobernar es la responsabilidad de armonizar los intereses en una sociedad para el bien de todos
Quien al vulgo le exige deberes sin avenirse a concederle derechos, lo habrá de pagar caro.
Los amores cobardes no llegan a amores ni a historias; se quedan allí. Ni el recuerdo los puede salvar, ni el mejor orador conjugar
¿Puede alguien recordar el amor? Es como querer conjugar el aroma de las rosas en un sótano. Podrías ver la rosa, pero el perfume, jamás. Y es esa la verdad de las cosas ¿no te parece? Su perfume.