A pesar de ello, la dominación del colonialismo en estos dos continentes todavía no ha terminado y los nuevos colonizadores intentan sustituir a sus antecesores. No pocos pueblos afroasiáticos siguen llevando una vida de esclavos colonialistas, sufriendo la discriminación racial y viendo cómo sus derechos humanos son atropellados.
La paz no es solamente la ausencia de la guerra; mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz.