Yo vivía con mi madre en un apartamento muy pequeño. Mi habitación era como en el salón. Es por eso que todavía me encanta dormir en los sofás.
Todos mis descubrimientos han sido respuestas a mis oraciones. Tomo mi telescopio y observo el espacio, lo que se encuentra a millones de kilómetros de distancia. No obstante, entro a mi habitación y, por medio de la oración, puedo acercarme más a Dios y al Cielo que si contara con todos los telescopios que hay en la Tierra
Prefiero estar en una tumba en Colombia que en una celda de la cárcel en los Estados Unidos.
Es la soledad de estar encerrado en la habitación que se llama uno mismo, ahora por fin lo entiendo. Que uno mismo es una celda dentro de la cárcel, y que esta celda siempre será distinta de las demás celda, y por eso siempre estará sola, y siempre estará dentro del edificio de la cárcel, pues forma parte de él.
Mi química con la banda nos ayudó a ponerla de nuevo en la parte alta y me dio una credibilidad musical que nunca había tenido antes, pero no pude conseguir el reconocimiento que necesitaba. Me sentía como si estuviera encerrado en un cubículo pequeño, como si estuviese en una casa ajena