Lo que ocurre en las junturas. Las grandes batallas, decía el general M..., se libran casi siempre en los puntos de intersección de los mapas de estado mayor.
La poesía es el punto de intersección entre el poder divino y la libertad humana
Quise gritar, pero no pude proferir ningún sonido. Esto duró algún tiempo. Por fin un reloj dio las doce, e inmediatamente vi entrar a un demonio con cuernos de fuego y una gran cola inflamada llevada por algunos diablillos que lo seguían. Ese demonio tenía un libro en una mano y una horquilla en la otra.
En cada encrucijada del sendera que lleva al futuro, la tradición ha colocado diez mil hombres para custodiar el pasado.
Yo no soy pesimista con respecto al porvenir de la cultura, soy escéptico respecto de la perdurabilidad de formas congeladas. Creo que el dogmatismo está condenado a resquebrajarse y reaparecer. La encrucijada del monoteísmo es la pérdida de credibilidad de su discurso.
La expresión es válida en sí misma, lo que hace el mundo mediático es decirte que si esa expresión no vende o no tiene aparición mediática la expresión no tiene ningún sentido y se genera la gran dicotomía del éxito y del fracaso
Empecé a sentir la dicotomía que ha caracterizado mi forma de pensar durante toda mi vida: ¿cuánto puede el amor por una raza oprimida concordar con el amor por una patria opresora?
Quienes deseen alcanzar la unidad, deben practicar la virtud sin hacer distinciones. Deben disolver todas las ideas de dualidad: bueno y malo, hermoso y feo, alto y bajo. Serán obligados a abandonar cualquier desviación mental nacida de creencias culturales o religiosas
Mientras el sistema de status permanece intacto, y mientras la clase ociosa puede emprender otros caminos de actividad no industrial que no sean los de matar el tiempo de un modo derrochador y carente de objeto, no cabe esperar ninguna desviación considerable del esquema general, establecido por la clase ociosa, de lo que es una vida merecedora de buena reputación.
Los funerales celebran el cruce de otra frontera, en muchos sentidos el más formal y prolongado de todos.
Recuerdo cómo salimos en tropel los jugadores de ajedrez...Y cómo, a medida que nos acercábamos a la plaza San Martín nos íbamos poniendo serios y éramos cada vez menos, y al fin, cuando crucé la plaza, me vi solo.