A pesar de mi escepticismo me ha quedado algo de superstición. por ejemplo esta extraña convicción de que todas las historias que en la vida ocurren tienen además un sentido, significan algo. Que la vida, con su propia historia dice algo sobre sí misma, que nos devela gradualmente alguno de sus secretos, que está ante nosotros como un acertijo que es necesario resolver.
Ciudades españolas más pequeñas que Madrid tienen unos niveles sonoros más altos, como por ejemplo puede ser Valencia, como puede ser Málaga, o como puede ser Bilbado (sic).
Es libre el que vive según elige.
Es cierto que la cuestión política no penetra profundamente en los detalles de la guerra; no se colocan los centinelas, no se conducen las patrullas según las consideraciones políticas. Pero la influencia del elemento político es tanto mayor, cuando se hace el plan de toda la guerra, de la campaña y a menudo también de una batalla.