Un día comprendió como sus brazos eran solamente de nubes; imposible con nubes estrechar hasta el fondo un cuerpo, una fortuna.
Evita la conversación de aquellas personas cuya palabra, en vez de ser trabajo, es placer. Los grandes parlanchines suelen ser espíritus refinadamente egoístas, que buscan nuestro trato, no para estrechar lazos sentimentales, sino para hacerse admirar y aplaudir.
Adviertan, pues, aquí los que son muy activos, que piensan ceñir al mundo con sus predicaciones y obras exteriores
Para poder oprimir a una clase es preciso asegurarle unas condiciones que le permitan, por lo menos, arrastrar su existencia de esclavitud.
Un pueblo se hace comunista por hambre, o por el exceso de opresión. Nosotros no tenemos poderes para provocar el hambre...Tampoco para provocar la opresión. Los únicos que pueden oprimir y tiranizar a un estado son los militares. Entonces auxiliamos a los militares a clavar las uñas en el poder...
Bueno, los elementos básicos de cualquier política exterior libertaria son presionar al gobierno a que no haga nada en el extranjero, simplemente que recoja su tienda y se regrese a casa.
En una democracia amenazada por el terrorismo todos los ciudadanos deben considerarse, en cierto sentido, como soldados en una batalla común. No deben presionar a su gobierno para que capitule o se rinda ante el terrorismo.
Adviertan, pues, aquí los que son muy activos, que piensan ceñir al mundo con sus predicaciones y obras exteriores
Ser creativo es instar a que el demonio no aceptar nada de segunda mano.
Las cartas de recomendación son las que se entregan a un inoportuno para que vaya a importunar a otro.
No es esa la técnica de la acción no violenta. El pueblo ha cometido un error al pensar que todo cuanto implica no matar era no violencia. A veces, matar es la parte más pura de la violencia, porque si se mata al que hace daño abiertamente, se acaba el daño que éste hacía. Pero hostigar es mucho peor. No suprime el daño; por el contrario, lo atrae sobre nuestras cabezas
Pese a la relativa apacibilidad de los austríacos, no me parece en absoluto inconcebible que, llegado el caso, se los pueda azuzar a cometer actos brutales y sangrientos.
La ciencia de adquirir riquezas está en encontrar cierta cantidad de hambrientos, pagarles tres monedas, hacerles producir por diez, amontonar una fortuna y acrecentarla de inmediato mediante algún golpe de mano con ayuda del Estado
Viste los diferentes colores de los hombres, los diferentes dolores de los hombres, sabes qué difícil es sufrir todo eso, amontonar todo eso en un solo pecho de hombre... sin que estalle.
Yo era libre, como tú, pero quería vivir demasiado. Mira, viento, mi cuerpo está frío y no hay a quién estrechar la mano...
Evita la conversación de aquellas personas cuya palabra, en vez de ser trabajo, es placer. Los grandes parlanchines suelen ser espíritus refinadamente egoístas, que buscan nuestro trato, no para estrechar lazos sentimentales, sino para hacerse admirar y aplaudir.
Infiel como el ala de los pájaros infieles tú siempre serás mía: los eucaliptus sangraban, un caballo ciego fue a agonizar entre los rieles porque no quería ver el fin de nuestro amor mientras se marchitaban los dedales de oro sembrados por un loco. Tú siempre serás mía. Infiel como el ala de los pájaros infieles.
Y pensar que pudimos enlazar nuestras manos y apurar en un beso la comunión de fértiles veranos...
Sólo quien no excluya nada de su existencia, ni lo que sea enigmático y misterioso, logrará sentir hondamente sus relaciones con otro ser como algo vivo, y sólo él estará en condiciones de apurar por sí mismo su propia vida.
Sacrificas tu pudor y tu cuerpo para lograr aprisionar lo que siempre se te ha fugado.
Experimentar amor en el modo de tener implica encerrar, aprisionar o dominar al objeto amado
Nadie nace perfecto. Para todo el mundo existen posibilidades de mejorarse a sí mismo. Las pruebas y dificultades deben de convertir a uno en un individuo mejor en lugar de crear complejos y constreñir la mente y el corazón.
El hombre mejor no es nunca el que fue menos niño, sino al revés: el que al pisar los treinta años encuentra acumulado en su corazón el más espléndido tesoro de la infancia.
Porque es tocando fondo, aunque sea en la amargura y la degradación, donde uno llega a saber quién es, y donde entonces empieza a pisar firme.
No se si me entendéis que no os enamoréis chicos y chicas pillar esto porque lo recordareis
Salte si me escuchas pocos valen lo que tú vales, sabes que me tienes con solo pulsar el play, ley como que la luz del sol resurge cada día, mira hacia las nubes supe que me encontrarías
Cada hombre debe restringir y limitar más su conocimiento a fin de competir con otros. El especialista sabe más y más sobre menos y, por último, sabe todo sobre nada.
Me gusta la democracia porque permite apreciar el arrollador avance del que tiene libertad para exprimir a unos cuantos y aumentar su capital.
El hablar de estas cosas y el tratar de comprender su naturaleza y, una vez comprendida, el tratar lentamente, humildemente, constantemente de expresar, de exprimir de nuevo, de la tierra grosera o de lo que la tierra produce, de la forma, del sonido y del color (que son las puertas de la cárcel del alma) una imagen de la belleza que hemos llegado a comprender: eso es el arte.
El duende de tu son, che bandoneón, se apiada del dolor de los demás, y al estrujar tu fueye dormilón se arrima al corazón que sufre más.
Jamás de los jamases sobre nuestro suelo sagrado ha de pisar insolente la planta invasora porque nuestro orgullo lo impide porque las naves del invasor para llegar a la presa de sus designios tendrán que navegar sobre la púrpura encendida de nuestra sangre joven.
Si eso que tenéis delante ya no os mueve, entonces yo os diría solamente una cosa y también me la diría a mí, poneos de rodillas y ya que os terminen de pisar la cabeza... ¡Rebelión! ¡Rebelión! ¡Rebelión!
El duende de tu son, che bandoneón, se apiada del dolor de los demás, y al estrujar tu fueye dormilón se arrima al corazón que sufre más.