El resorte del Universo tal como nos desvela la Segunda Ley consiste en su degradación imparable a medida que la energía y la materia se expanden desordenadamente.
Si el resorte del gobierno popular en tiempos de paz es la virtud, el resorte del gobierno durante la revolución son, al mismo tiempo, la Virtud y el Terror; la virtud sin la cual el terror es mortal; el terror sin el cual la virtud es impotente