Los pájaros son el recuerdo cotidiano de la atadura que nos une a la tierra diariamente.
La filosofía de estar aquí ahora y dejar de lado toda atadura es una experiencia. Cuando lo haces, descubres que realmente estás perfectamente bien, de hecho te sientes maravillosamente. Déjate ser, deja que el mundo sea, y abandona la lucha por tratar de cambiar las cosas.
A juzgar por la actitud de los hombres y mujeres de la calle el otro día, y la de mi hermano estos últimos días, la cosa es poco más o menos segura: quieren que me saque el cinturón, lo amarre a un poste y me cuelgue. Nadie los llamará asesinos y, sin embargo, verán colmados sus deseos secretos.