Es bien curioso, pero en las pocas ocasiones en que he sido requerido para tocar el bongo en público, al presentador nunca se le ocurrió mencionar que también me dedico a la física teórica. Pienso que esto puede deberse a que respetamos más las artes que las ciencias.
Él me guiaba por el suelo de piedra con una sinceridad semiseria, por no mencionar el placer inconsciente de estar vivo, vivo por accidente, de una manera cómica y sin ninguna razón, la clase de placer que experimentas de niño cuando aprendes a tocar una tonada con un peine y papel higiénico.
Una figura excepcional entra en la historia. El nombre de Francisco Franco, será ya un jalón del acontecer español y un hito, al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación de estado.
Quienes dicen que el arte no debe propagar doctrinas suelen referirse a doctrinas contrarias a las suyas.
Es improcedente hablar de reforma sin hacer referencia a la forma.
No hay que mentar la soga en casa del ahorcado.
La belleza debe apelar a los sentidos, nos debe proporcionar un goce inmediato, nos debe impresionar e insinuar sin ningún esfuerzo de nuestra parte.
Lo que en un momento dado se llamó teatro del absurdo -terminología ya pasada de moda, totalmente- no era más que una aproximación poética y humorística a las cosas. De hecho, jamás me habría atrevido -en teatro y en otras áreas- a insinuar o a decir cosas si no es a través del humor.
Para obtener las cualidades de los tonos particulares hay que introducir en la luz un elemento de tenuidad, de densidad, de opacidad y sugerir así calor, frío, cólera, miedo.
Estamos descubriendo las capacidades que se necesitan para tener trabajo en las sociedades industriales. La primera, la capacidad de trabajar colaborativamente en lugar de competitivamente. El saber utilizar los nuevos sistemas de comunicación digital, que tampoco se ha enseñado adecuadamente. Es un proceso de cambio continuo que lo menos que puede sugerir es tristeza y pesimismo
Como Antístenes, filósofo cínico, tuviese la capa rota y la anduviese enseñando a todos, díjole Sócrates: Por la hendidura de tu capa conozco tu vanidad. Quiso dar a entender que peor era aquella presunción que tenía enseñando su capa rota, que si trajera una vestidura más rica.
La confesión de los pequeños defectos es frecuentemente un deseo de dar a entender que no tenemos otros mayores
En la canción White Horse, tu pones todo lo que tienes en el amor y obtienes tu corazón roto Muchas personas son capaces de relacionarse con esas canciones. las que me yo escribi cuando estaba realmente pasando algo terrible
Desde luego, para quien tener es la forma principal de relacionarse con el mundo, las ideas que no puede definir claramente (o redactar) le causan temor, como cualquier cosa que se desarrolla y cambia y que no puede controlarse.
¿Puede uno recordar el amor? Es como tratar de evocar el aroma de las rosas en un sótano. Puedes ver la rosa, pero nunca el perfume.
Si quieres construir un barco, no empieces por buscar madera, cortar tablas o distribuir el trabajo, sino que primero has de evocar en los hombres el anhelo de mar libre y ancho.