Hemos perdido nuestro espíritu en las regiones de lo abstracto y general, al igual que los monjes lo dejan marchitar en el mundo de la oración y la contemplación
Como una pintura nos iremos borrando. Como una flor nos hemos de secar sobre la tierra. Cual ropaje de plumas de quetzal...
Se te va a secar el cerebro a través de la polla de tantas pajas pensando en ella, déjalo ya